Eso que usted calla...
La relación médico-paciente es una de las más fundamentales. De ella depende la salud y la comodidad de la persona, y el conocimiento y prestigio del doctor
Hacer silencio a lo que pregunta el doctor o no confesar que se han ganado diez kilos en tres meses, puede arriesgar su vida.
La relación médico-paciente es una de las más fundamentales. De ella depende la salud y la comodidad de la persona, y el conocimiento y prestigio del doctor. De acuerdo a la doctora Bárbara Korsh, profesora de la Universidad del Sur de California y autora del libro The Intelligent Patient's Guide to the Doctor-Patient Relationship (La inteligencia del paciente: Guía para la relación médico-paciente) explica que muchos pacientes ocultan problemas pasados y hasta su historia familiar para lucir bien ante el médico y no dar explicaciones incómodas, porque los que consultan desean ser "bien tratados" y tienen prejuicios de que los médicos lo puedan ver mal por errores cometidos en el pasado.
Sin embargo, hablar de errores graves o tontos, puede revelar el transfondo de un padecimiento antes que se convierta en algo grave. Entre las cosas que no se deben ocultar a los médicos están:
1.- "No me hice el tratamiento": Entre el 30 y el 50% de las personas que visitan al médico y se les indican medicinas, no cumplen a cabalidad con la ingesta de los productos que pueden ayudar a incrementarle la salud. Es importante hablar directamente con el especialista y comunicar que el tratamiento no se realizó o no finalizó y las razones. De esta forma el galeno podría bien indicar tratamientos más accesibles al bolsillo o sencillamente prescribirá una medicina que vaya mejor con la forma de vida del paciente.
2.- "Estoy haciendo dieta, tomando laxantes y/o medicinas para adelgazar": Los medicamentos para perder peso si no son administrados por un especialista pueden generar problemas de salud, malestar y cansancio. De igual forma es imprescindible comunicar si se toma algún otro tratamiento, pastillas anticonceptivas y vitaminas.
3.- "¿Mis papás? Pues perfectos": La historia familiar es determinante para un persona. Aquellos que padecen cáncer o algún problema hereditario generalmente están en familias cuyo pasado está vinculado a ciertos tipos de enfermedades. El médico tratante debe conocer a fondo la historia médica del núcleo familiar para intentar prevenir enfermedades.
4.- "Estoy deprimido" , "Duermo mucho o duermo poco", "No tengo una vida sexual satisfactoria": Estas frases podrían ser indicadores que el estado de salud mental de la persona no es apropiado; también, que podrían tener un deterioro hormonal, físico y hasta mental. Las sensaciones y emociones fuertes o tristes podrían desencadenar padecimientos o poca mejoría en caso de estar recibiendo tratamientos.
5.- "También visito a otro médico": Los doctores, generalmente, no se sienten molestos si las personas visitan otros médicos buscando nuevas opiniones u opciones de tratamiento, pero los pacientes perciben que podrían estar traicionando la confianza del especialista. Es importante comunicar si se está tomando un tratamiento distinto o si se está haciendo alguna terapia alternativa para evitar problemas físicos a mediano plazo.
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